En caso de emergencia, es posible que los pasajeros necesiten utilizar el Martillo de seguridad 4 en 1 romper la ventana para escapar. En este momento es fundamental dominar la fuerza adecuada de los golpes. Debido a que el material, el grosor y el método de instalación del vidrio de las ventanas de diferentes vehículos pueden variar, a menudo es difícil predecir con precisión el efecto del golpe aplicado al mismo tiempo. Para maximizar el efecto de rotura de la ventana y reducir los riesgos potenciales, se recomienda adoptar un enfoque paso a paso para aumentar la fuerza de los golpes.
Intento preliminar: Realizar un golpe inicial a la ventana con una fuerza moderada y controlada. Esta fuerza debe ser suficiente para hacer suficiente contacto entre la cabeza del martillo y el vidrio, pero no tanto como para causar que el vidrio se rompa inmediatamente. El propósito de este paso es probar la reactividad del vidrio y determinar el punto de rotura aproximado.
Observe la retroalimentación: Después del golpe inicial, observe atentamente los cambios en la superficie del vidrio. Si el vidrio se agrieta o se abolla, significa que el golpe ha hecho efecto en el vidrio, pero es posible que sea necesario realizar más esfuerzos. Si el vidrio casi no reacciona, puede ser necesario aumentar ligeramente la fuerza de los golpes.
Aumente gradualmente: De acuerdo con la retroalimentación del golpe inicial, aumente gradualmente la fuerza de los golpes. Cada aumento de fuerza debe ser moderado para evitar un aumento repentino de fuerza que haga volar fragmentos de vidrio. Al aumentar gradualmente la fuerza, el proceso de rotura de la ventana se puede controlar con mayor precisión para garantizar la seguridad.
Observación continua: Durante todo el proceso de golpe, continúe observando los cambios en el vidrio. Una vez que encuentre señales de que el vidrio está a punto de romperse, debe reducir adecuadamente la fuerza del golpe o dejar de golpear para evitar daños excesivos y provocar que salgan fragmentos.